domingo, 4 de julio de 2021

¿SOY CONSCIENTE DE SU PRESENCIA?

Un día, hace mucho tiempo, me hice estas preguntas a mí misma: ¿será que realmente soy consciente de que Jesús está, literalmente, a mi lado? ¿y en absolutamente todo momento? ¿Realmente recuerdo que a Él puedo acudir en LITERALMENTE cualquier momento? ¿o me olvido de que Él está siempre ahí, dispuesto a ayudarme? 

Resulta que me puse a reflexionar en esto y me di con que las respuestas eran más un NO que un SÍ. No siempre recordaba que Él estaba a mi lado, muchas veces la ansiedad, la duda y el miedo me abrumaban, y me olvidaba de que Dios estaba ahí, dispuesto a oírme, a ayudarme, a sanarme, a darme la seguridad y la paz que tanto necesitaba...

Pero con el tiempo Dios fue trabajando eso en mí... (y aún continúa trabajando) y a través de diferentes situaciones que me tocó vivir, me enseñó (y aún me sigue enseñando) que pase lo que pase, siempre acuda a Él; que tanto en mis días malos como buenos, Él sigue siendo bueno y fiel; que aunque a veces lo olvide, Él no deja de ser mi Padre y mi mejor amigo; que cuando me sienta sola, sea consciente de que en realidad no lo estoy, porque Él está ahí para mí; que cuando me sienta triste por algo, se lo cuente, y cuando me sienta alegre también; que Él me ama como soy y que nada de lo que yo haga va a hacer que Él deje de amarme; que Él anhela profundamente bendecirme, guardarme y guiar mis pasos por sendas de rectitud, y que todo lo que Él permita que pase en mi vida es para mi bien. 

Hoy gracias a Dios puedo decir que soy un poco más consciente de su presencia en mi vida y de la tremenda necesidad que tengo de Él. Con el pasar del tiempo, me doy cuenta, cada vez más, de cuánto mi corazón lo necesita, de cuánto mi alma lo anhela, de cuán débil soy yo y cuán fuerte es Él, de cuánto necesito aprender de Él, de cuánta falta me hace cuando no le hablo o cuando no le adoro, y de cuánto necesito su luz en mis momentos de oscuridad. Literalmente, cada vez soy más consciente de que sin Él mi vida no tiene ni el menor de los sentidos, de que sin Él no soy nada, y de que no hay nada ni nadie en este mundo ni en el Universo entero que pueda llenar mi vida y saciar mi corazón más que Él. 

Y hoy quiero invitarte, a que también seas consciente de su presencia 💖
Busca a Dios en los detalles y lo vas a encontrar. Él no solo está en las iglesias, sino que también lo podemos encontrar en la risa de un niño, en el cantar de los pajarillos, en el abrazo de nuestra madre, en el sabio consejo de nuestro padre, en el mensaje de nuestros amigos y familiares preguntándonos cómo estamos, ¡y en cuántas cosas más!

Te animo a que busques a Dios en donde sea que estés... ya sea que estés en la cocina, en el patio, en el trabajo, en la escuela, en tu habitación, en el colectivo o en la universidad; ahí en donde sea que te encuentres, háblale, búscalo en los detalles, en la naturaleza, te aseguro que vas a sentir su presencia y a la vez una paz que no tendrá igual. 

Seamos conscientes de su presencia, recordemos que no estamos solos. Él está siempre a nuestro lado, viéndonos en todo momento. Él sabe por lo que estamos pasando, Él no es ajeno a nuestra situación, al contrario, se preocupa por nosotros y quiere ayudarnos. ¿Cómo no vamos a buscarlo? ¿Cómo no darle lugar? Si es lo mejor que nos puede pasar en la vida💖

Él te ama más de lo que puedas imaginar. ¡No lo olvides!

Un abrazo.